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23 09 22 PUZOL, Anna, Nos cansamos de todo

Los seres humanos nos cansamos de todo y masticamos insatisfacción. El que está solo, quiere compañía; el que tiene compañía, quiere estar solo. A veces incluso, nos cansamos de Dios-Jesús y lo dejamos en la cuneta o lo sacamos de nuestro pensamiento. Jugamos con Dios, en ocasiones lo hacemos nuestro centro, otras veces lo ignoramos por completo. Menos mal que Dios, por tener buen humor, se deja manipular y manosear a nuestro antojo, y no se inmuta. Dios se queda donde le colocamos y no se inquieta. Sonríe ante nuestra mezquindad e ignorancia. Dios permanece siempre como Dios. La inquietud es nuestra, la llevamos y sufrimos nosotros, no Dios. Sufrimos más de lo que Dios quiere, tal vez por ignorarle a Él, que es el dador de la paz y el gozo y nos quiere felices con Él y todos juntos.

Sucede que, un día, sin saber cómo ni por qué, algo nos despierta y nos levanta, más que de nuestro sueño, de nuestras muertes. Y volvemos a caer en la cuenta de que nos habíamos alejado de Dios, y queremos volver a encontrarnos con Él. Y Dios no se había ido, lo hallamos donde lo habíamos dejado, porque Dios siempre se hace encontradizo con su criatura amada. Y Dios, tan feliz y de buen humor, nos vuelve a tomar en sus brazos y abrazos y nos sigue amando, que Dios solo sabe de amor y andar en amores.

Dios no es un invento de nuestra mente. Ninguna inteligencia humana sabría inventar al Dios Uno y Único. Todo lo más que sabemos hacer los humanos es crear ídolos y endiosarlos. Pero Dios es el in-creable. Él es el que Es. La felicidad la da Él, no nuestros pensamientos y razonamientos. La felicidad y la plenitud es cuestión de enamoramiento del corazón, no del pensar y razonar de la mente. Siempre será una disposición interior amorosa.

Tener necesidad de Dios no es una necedad, es una gracia, y una gracia que nos humaniza a gusto de Dios. Y me quedo con Dios, con el único deseo de decir otra vez: Sí, creo y te amo, quiero seguir caminando a tu lado. Y Dios sigue sonriendo y dice que me ama. Y ahora me lo creo un poco más que cuando empecé mi andadura con Él. Y sé que puedo cometer la estupidez de volverlo a dejar. Que no soy mejor que Pedro, ni mejor o peor que todos sus discípulos que le abandonaron.

Como ellos y ellas, necesito que Jesús se me muestre resucitado para ser testigo de su presencia en medio de nosotros y dentro de nosotros. Así, pequeña, menesterosa, alocada, apasionada, auténtica también, necesito que Dios-Jesús permanezca, aunque yo me vaya, huidiza como una cabra. Él siempre volverá a hacerse encontradizo, esta es mi esperanza y absoluta confianza. No cansarnos de Dios-Jesús. Alejarnos de Él es perder la posibilidad de encontrar el tesoro escondido. Que Dios-Jesús es regalador de todo lo que necesitamos. Sigamos sus pasos.

23 09 05 Zaragoza, Crónica del aniversario de la fusión

Queridas hermanas de la Federación:

Con alegría nos ponemos en contacto con vosotras para enviaros una pequeña crónica con ocasión del primer aniversario de nuestra fusión: San José-Santa Teresa.

Fue el pasado 24 de agosto y hemos querido celebrarlo por todo lo alto y en la intimidad que es como más se disfruta.

Para el primer acto de la jornada (canto de Laudes) nos reunimos toda la comunidad en el coro alto pues allí hemos colocado la preciosísima imagen de Santa Teresa obra de Gregorio Hernández que trajeron nuestras hermanas.

Damos gracias a Dios por poder estar todas juntas “en pie y en activo” para esta importante celebración que es el Oficio Litúrgico.

Invitamos a celebrar la Eucaristía al recién estrenado prior de la comunidad de Zaragoza (San Juan de la Cruz), padre Antonio Leal. La tuvimos a la hora de siempre (8:30 de la mañana) acompañadas de nuestros habituales feligreses que ya son de casa para que resultara más hogareño. En la homilía nos dirigió unas sencillas palabras de enhorabuena por el don de la fusión y de la unidad…

Después de la celebración, compartió con nosotras un delicioso y abundante desayuno. El refectorio estaba adornado de forma muy simpática, no faltaba la campanita colgada en la pared, ni la Santa Madre con su hábito de sayal, ni los letreros haciendo alusión al momento.

En la sobremesa se comentaron todos los temas de actualidad: la impresión de los carmelitas jóvenes en la JMJ, los posteriores encuentros que tuvieron y como es natural -ya que el anterior destino del padre Antonio fue Canarias-, los grandes problemas y sufrimientos que la región está pasando: como si no bastara con el desastre del volcán, ahora el incendio.

Fue hermoso oírle hablar con tanto cariño y conocimiento; y como de todo se aprende, nos hemos enterado que los pinos de canarias son distintos a los demás, pues aunque se quemen no se mueren porque el fuego no les penetra, solo arden exteriormente.

Esto, gracias a Dios contribuye a que las riquezas provenientes del turismo no se pierdan.

A la hora de la comida, ya solas se leyó una crónica o mejor dicho, una evaluación humorística de los sucesos de este año y de los preparativos de los días anteriores a la fusión.

En recreo las aspirantes a artistas nos ofrecieron un hermoso canto de no sabemos dónde deleitándonos con su interpretación.

Las artesanas del gremio de manualidades habían confeccionado unas encantadoras cajitas dignas de exposición que nos regalaron a cada una, rellenas de confites. Las cajitas llevaban la siguiente inscripción que vale la pena reproducir: “Uno solo puede ser vencido, pero dos pueden resistir. ¡La cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente!” Nos parece una preciosa alegoría de lo que es una fusión.

Entre unas cosas y otras pasamos un día muy feliz y constatamos que somos ya una sola comunidad y por cierto muy hermosa. Y ahora comenzamos un nuevo año “de bien en mejor”.

Muchas gracias por vuestra atención.

Vuestras hermanas de Zaragoza.

23 08 28 Daimiel, Entrevista a Hna Farah.

Ricardo Franco El Debate, Madrid 28/08/2023

Farah es carmelita descalza en el convento de Daimiel. Nació en un pueblo de Madagascar; una zona cristiana protestante y católica. La primera proclamación del Evangelio se hizo en tiempos de San Vicente de Paúl en el sur de la Isla por los Padres Lazaristas, pero fue alrededor del 1850 con los Jesuitas cuando el catolicismo arraigó fuertemente, centrándose en la educación. Desde ahí y tras «vagabundear» en busca de sí misma, santa Teresa de Lisieux la atrajo al amor infinito de Dios que es, sin duda, un gran imán y un gran pozo de agua fresca para los corazones más sedientos.

Farah, ¿es usted cristiana «de cuna» o conversa?

–Mi familia, desde temprana edad, me educó en la fe. Estudié en una escuela católica de los padres Carmelitas, entré en asociaciones católicas, donde llegué a ser animadora. La oración, la atención a los demás, la visita a los pueblecitos, la liturgia, la acogida de los pobres, la vida sencilla sin móviles en medio de la naturaleza: ríos, montañas, animales, campos de flores, mil juegos de niños, lluvia abundante, el perdernos en los bosques, los amigos, el calor del hogar, la ternura exquisita de mis padres, el amor de mis hermanos (siendo yo la más pequeña de la casa de mi padre)… han hecho mi vida cotidiana alegre e interesante, con tareas escolares, hasta la universidad adonde fui yo la única que comenzó porque, después del bachillerato, la mayoría de mis amigas entraron al Carmelo.

Solía visitarlas porque el Carmelo está justo a 10 minutos de la universidad. Un día, vi una frase de santa Teresa de Lisieux, una de esas frases que te penetra el alma. Dijeron que vendría su reliquia. Quería conocerla. A su llegada, lloraba, sin saber por qué, sin conocerla. De verdad el camino del Señor no es nuestro camino. Aquellas lágrimas despertaron mi deseo de entregarme al Señor según la espiritualidad de la pequeña Teresa. Empecé a leer sus obras y a profundizar muy concretamente mi fe.

¿Qué ha encontrado en el cristianismo?

–Primeramente, he encontrado a Jesucristo que me ama. Entonces soy cristiana de christianós que, según los Hechos de los Apóstoles, se designa tres veces a los seguidores de Jesús, quien dio su Vida por mí y por cada persona humana. En Él, los cristianos saborean los prodigios del mundo futuro y su vida es arrastrada por Cristo al seno de la vida divina para que ya no vivan para sí los que viven, sino para Aquel que murió y resucitó por ellos. Dios Amigo que vale la pena. Amor que tiene propiedad de igualar al que ama con la cosa amada; y san Pablo lo une más profundamente: «sois cuerpo de Cristo», «sois Templo de Dios», «sois de Cristo».

En definitiva, siento que pertenezco a Él. Como entre personas enamoradas, soy de Alguien, amada por Alguien que da sentido a mi vida hasta en los actos mínimos. Y saber para Quién vivo y me hace vivir de Él y unida a Él más en la Eucaristía, todo tiene sentido y sabor: las aflicciones, la alegría. Jesús vive en mi corazón, llena mis pasos de su amor y realiza en mí y conmigo su Unidad absoluta de Amor recreando y enamorando en cada instante con su atención amorosa. En el cristianismo pues no estoy sola sino siempre en su Presencia, Amor eterno e infinito. Vive Él: Vida, Verdad y Camino en mí y mi vida se centra en Él para orarle, adorarle, acoger las Bienaventuranzas y aprender así a amar, a amar hasta el fin en el día a día. En una palabra: soy de Jesús, yo soy para Él y Él es para mí. Vivo en Él como cristiano que vive solo por Cristo, que vive de Cristo, es decir, el que vive de su vida, y en quien Cristo vive y actúa en el mundo. Él es el único que nos puede salvar.

¿Por qué acaba una mujer en el Carmelo? ¿Qué buscaba en él?

–El Carmelo de santa Teresa, con sus numerosos santos y con su profunda y vasta espiritualidad, atrae a muchos y no solo en el ámbito del cristianismo, sino también de otras religiones. Hay muchas familias religiosas que se basan y se nutren de la espiritualidad carmelitana. La pequeña Teresa, de quien celebramos los 150 años de su nacimiento, con su Caminito y su conocida vida lleva a muchos a seguirla.

Así, atraída por el Carmelo hasta física y misteriosamente. Costó mucho trabajo salir de mi país porque era menor de edad. Después de pasar por la burocracia cambiando billete de avión una y otra vez, providencialmente dejé todo el día de la fiesta de santa Teresa de Jesús, sin conocerla. Luego, vagabundeaba en muchos lugares del mundo: desde Roma, la ciudad eterna hasta el rinconcito de Belén o la escondida capilla de Nazaret del hermanito Charles de Foucauld… Y al final: estoy en el Carmelo. Una de mis hermanas hizo la misma pregunta: ¿después de ver el mundo, por qué aquí?.

Es historia de Dios conmigo. No como Israel que caminó por el desierto hasta la tierra prometida, sino junto al Maestro, pasé por los jardines, por montes perfumados y riberas hasta este lugar de la Mancha…, para caer en la cuenta de que lo que importa es a Quién busco, con Quién quiero estar y, no los lugares hermosos o una vida perfecta.

Así, no cogí las flores, ni temí las fieras, y pasé los fuertes y fronteras buscando al Amado, aprendiendo a ser hija de santa Teresa según su formidable experiencia y sus enseñanzas llenas de divina sabiduría y espléndida pedagogía. Claro, viviendo en una parroquia carmelitana desde niña, naturalmente respiraba ya teresianamente, porque santa Teresa entró espontáneamente en mi vida, mostrándome el camino de perfección a través del diálogo de amor con Jesús y la caridad fraterna. Me dejé fluir.

¿Por qué este camino tan radical dentro de la Iglesia?

–Ante todo es obra de Dios. Me «primerea» simultáneamente, me hace desear: mi deseo de Dios, la sed de plenitud. A lo largo de estos años de peregrinar y «perderme», Él me busca a mí más que yo a Él, su Mano me cuida de una manera tan intensa, fuerte, profunda, continua, que hiere y misericordia… y crea en mí el darme a Él. Tal ósmosis la afirma san Agustín: «Nos hiciste Señor para ti y nuestro corazón está inquieto hasta que no descansa en Ti» . Si conociésemos pues éste amor divino por mí también por ti y para este fin de Amor fuimos creados, entonces se vuelve natural consagrarnos a Él con inmensa generosidad, como Él lo ha hecho por nosotros a pesar de nuestras infidelidades y torpeza. Así lo explica san Juan de la Cruz: «Cayendo el alma en la cuenta de lo que está obligada a hacer; conociendo la gran deuda que debe a Dios en haberla criado solamente para Sí…».

La vida cristiana, pues, es en sí misma una vida sobrenatural, que va y vive de una manera más allá de lo habitual y aparente vida terrenal, porque es la vida de Jesús, el Maestro. Vida que se eleva más allá del sentido común, de la superficialidad, como expresa: «Si no sois mejores que los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos». O sea, exige y aspira siempre a lo inmenso, a lo más, a lo divino que me engolosina a vivir con Jesús haciendo lo poquito que es en mí. Su Amor mejor y mayor se convirtió en mi Fortaleza y Alegría para solo contentar al Señor. Él regala las gracias necesarias, se hace a mi medida según mi capacidad y naturaleza. Por eso mi ser miserable, transfigurada y elevada por el Amor, se ha dejado atraer e invitar a darse entero y radicalmente a Él en la forma tan exigente, que es el Carmelo Teresiano.

¿Qué ha encontrado en el Carmelo? ¿Qué tiene de especial?

–«No somos islas sino archipiélagos. Todas las cosas son así, no es una aquí y otra allá, están conectadas por hilos invisibles: detrás de cada reacción siempre hay una relación», escribe Alessandro d’Avenia. Estamos en la era digital donde tal relación se reduce en conceptos, en masa de seguidores sin llegar a tocar el corazón, conectados sin con-tacto y emoción fugaz. En el Carmelo, pequeño colegio de Cristo, procuramos con verdad esta relación que va más allá. Desde el trato con Jesús como Amigo, «aquí todas han de ser amigas, todas se han de amar, todas se han de ayudar». Puesto que somos distintas, cada una con algo único que puede ofrecer a los demás. Relacionarse es un arte.

Vengo de una familia numerosa donde la amistad es imprescindible. Así en el Carmelo, descubrí una vez más la adaptabilidad del Señor al «tal como soy». Creo pues que cada hijo/hija de santa Teresa se identifica con ser especialista en Amistad. Tal continuo ejercicio de amor no es posible sin ser orante con la fidelidad a lo que el Señor nos confía: en las pequeñas y grandes cosas, en la cotidianidad, en la enfermedad y tribulación, como en la alegría y sequedad.

En un mundo donde vivimos la cultura de contenedor que desprecia el contenido, lo especial en el Carmelo es justo lo interior, llamada a ser auténtica y verdadera hasta parecer que no hacemos nada. No hay productividad y nuestra oración es una espera, no resultado inmediato. Pues es vida sencilla puesta continuamente a prueba en busca del Amado y contentarle desde nuestra pobreza. En definitiva, una vida hecha para ser totalmente del Otro, con gratuidad a Aquel que pronunció: «Tú eres mía». Un sí para siempre, que se abre para acoger una Presencia: Señor, aquí la palma de mis manos, las vidas, los rostros, las historias, los dejo fluir entre mis dedos para que los mires.

A su juicio, ¿cree que se conoce realmente qué es la fe cristiana?

–Hay personas que conocen a Jesús, en cambio, otros lo ignoran por completo. Desafortunadamente, hace mucho que el Occidente se alejó de Dios y vive como si Dios no existiera, a muchas personas no les interesa la fe o la religión, viven sin hacerse las preguntas fundamentales de la vida: de dónde y de Quién venimos, adónde vamos, por qué vivimos… día tras día sin referirse a Dios, a verdaderas virtudes y profundas responsabilidades personales y sociales. Un desorden de la jerarquía de valores perdiendo la mejor parte, lo más importante, lo único necesario.

Sin embargo, creo también que muchos de nosotros cristianos, no conocemos qué es la fe cristiana. Primero porque la fe es un Don, hay que desearla, acogerla y guardarla. Dice el Papa: «La fe no es una etiqueta religiosa, sino una relación personal con el Señor. Hagan creíble la fe a través de las decisiones. Porque si la fe no genera estilos de vida convincentes, no hace fermentar la masa del mundo. No basta que un cristiano esté convencido, debe ser convincente». En definitiva, es exigente, es seguir a Jesús Crucificado, desfigurado, en una sociedad donde se evita el mínimo sufrimiento, con comodidades, cultura del descarte, mundanidad y pocos quieren conocerlo. Bernanos escribe: «Nuestro Señor no escribió que fuéramos la miel de la tierra, muchacho, sino la sal…. La sal quema al contacto con la piel. Pero también evita que se pudra»; pues la fe escuece, resume Luigi Epicoco. La fe verdadera es atrevida, busca, lucha con discernimiento continuo, camina con corazón inquieto como los israelitas que se ponen en marcha porque «el amor de Dios es sorpresa, siempre sorprende, siempre nos mantiene alerta y nos sorprende». Como el relato de la mujer cananea, a veces la vida espiritual falla, no nos consuela, nuestra oración no obtiene respuesta y nos sentimos insultados, solos, incomprendidos, rechazados. La fe es permanecer.

El Espíritu Santo tiene su momento, pero necesitamos orarlo para que actúe en todos los lugares del mundo y todas las personas. Oro para que todas ellas tengan la verdadera fe y conozcan cada día y cada vez más a Jesús, y lo amen y lo hagan amar inmensamente, como Él lo merece.

Para usted, Farah, ¿quién es Jesús? ¿Qué es el cristianismo? ¿Qué es la Iglesia?

–«La Iglesia es el lugar para todos… ¡Todos, todos, todos!» afirmó el Papa Francisco a los jóvenes. «Hay espacio para todos, ninguno sobra, ninguno está de más» así como somos, porque Dios nos ama como somos, con los defectos, limitaciones y con las ganas que tenemos de seguir adelante en la vida, no como quisiéramos ser o la sociedad quisiera que seamos. La Iglesia es Madre de todos, que quiere que estemos con el Señor, con la misión de ir a los confines y traer a todos: sanos, enfermos, chicos y grandes, buenos y pecadores. Porque desde el comienzo de nuestra vida, Jesús llamó a cada uno de nosotros por nuestro nombre, porque ninguno de nosotros es un número, sino un rostro, un corazón.

El cristianismo es el encuentro con el Amor de Dios nuestro Salvador que nos ha creado como hijos suyos, nos ha redimido por su gracia y por el gran amor con que nos amó entregando a su Hijo único, «para que todo el que crea en Él no perezca, sino que tenga la vida eterna». Después de experimentar ser amados y poder amar de Amor con la fuerza de este Don suyo, el cristianismo es un modo de vivir en la escucha constante a Jesús e ir apresurada a llevarle a nuestro prójimo, como María, para que muchos contemplen el Rostro del Amado.

Jesús es «El que está». Alguien que me habita susurrando: ¡qué hermosa eres, amada mía!, ¡qué hermosa eres! Eres precioso para mis ojos, y yo te amo. Me dibuja en forma de caricia mientras seco las manos con toalla, de perfume de té de manzanilla que tomas en el invierno mientras vives el calor agosteño. Es Alegría que me mira hermoseando mi fealdad por puro Amor… La Verdad inmutable que me invita vivir su Alianza: «Estoy aquí para ti, tú eres amada por mi Amor eterno».

23 08 15, Castellón-Villar, El Señor ha estado grande con nosotras y estamos alegres

Muy queridas hermanas de la Federación:

Hace ya tiempo que queríamos compartir con vosotras algo de lo que estamos viviendo, en agradecimiento a todas vuestras muestras de cariño y de interés por nosotras en este proceso de fusión. Os agradecemos muchísimo vuestra oración.

Somos conscientes de estar viviendo un tiempo de gracia. El otro día en recreación nos asombrábamos por el modo como se han ido dando todas las cosas. Parece increíble que en tan poco tiempo se esté resolviendo todo, y sobre todo, ese sentir la cercanía y la confianza en el trato mutuo. De unas y de otras nace expresar gratitud a Dios por los signos que percibimos de su presencia y su cercanía, en medio de una situación que humanamente no es fácil.

Castellón: En un momento en que veíamos que ya nuestras fuerzas eran pocas y antes de reaccionar para ver qué teníamos que hacer, nos llega el ofrecimiento de unas hermanas que se muestran dispuestas a acogernos. Nos parecía que era de Dios. Muy pronto, antes del 19 de marzo, solemnidad de San José, titular de nuestro monasterio y auxilio nuestro en nuestras necesidades, la comunidad nos reunimos en capítulo y por unanimidad aceptamos la oferta que nos habían hecho las hermanas de Villar del Arzobispo. El 22 de marzo vinieron por primera vez a visitarnos. Poco después nosotras les devolvíamos la visita.

Al principio lloramos, pero después vimos que así no ganábamos nada, y nos pusimos manos a la obra con la mejor disposición.

Cuatro meses después, el 26 de julio, todas juntas, acompañadas por nuestro capellán, Sebas, viajamos a nuestra nueva casa.

Aún nos estamos acomodando, colocando nuestras cosas, y abriéndonos a la nueva realidad en la que estamos, pero estamos muy agradecidas a Dios por la acogida atenta de nuestras hermanas.

Villar: Con motivo del fallecimiento de la Hna M.ª Ángeles, nuestra Priora, Hna Carmen Teresa, estuvo conversando con nuestras hermanas de Castellón. Quedó muy conmovida por lo que estaban viviendo, con la enfermedad de las Hnas M.ª Soledad y Ana María. En recreo comentó que podíamos ofrecernos para acoger a algunas de ellas. La comunidad expresamos que en este momento estábamos en condiciones de acogerlas a todas. Ella hizo llegar a Hna Mª Soledad nuestro ofrecimiento de acogerlas, si ellas querían.

Nuestra sorpresa fue una pronta llamada suya diciéndonos que se acababan de reunir en capítulo y que aceptaban nuestra invitación. Nos pusimos a trabajar a buen ritmo para acomodar la casa lo mejor posible. Ponernos en función de acogerlas nos ha hecho mucho bien.

Sentimos que ellas son un regalo para nosotras. Podemos disfrutar de la riqueza espiritual que han ido adquiriendo a lo largo de los años. Es muy bonito ver gestos que te hablan muy claro de Dios. Es como si se hubieran puesto de acuerdo para facilitarnos las cosas: gratitud, reconocimiento, disculpa, gestos de cercanía… ¡Es una bendición!

Hemos vivido algunos momentos de celebración por el nacimiento de esta nueva comunidad con el canto, con la danza…

Fue muy sencillo, pero bonito, el gesto de entronización de la emblemática imagen de San José de la comunidad de Castellón, que ahora ocupa un lugar preferente en nuestro coro. Y fue muy simpática la “transfiguración” de nuestras nuevas hermanas que, el día de la Transfiguración del Señor estrenaron su velo. Ellas pidieron hacer el cambio desde su voluntad de que efectivamente seamos una sola comunidad.

En ese camino estamos. Agradecemos muchísimo a Gema su interés y su cercanía en todo el proceso, y seguimos agradeciendo vuestra oración y vuestro apoyo. Sentimos con fuerza que lo que estamos viviendo es un don de Dios y queremos estar disponibles para que Él pueda seguir escribiendo historia de salvación con nuestra vidas.

Un abrazo grande de vuestras hermanas de Castellón y de Villar, todas juntas ahora en Villar.

23 07 29 SERRA, PARTIDA AL CIELO DE NUESTRA HNA. CARMEN DE CRISTO

(Carmen Albert Soriano, 12 julio 1936 – + 29 julio 2023)

Muy queridas hermanas, queremos agradecer las muestras de cariño, oración y cercanía que habéis tenido por el fallecimiento de nuestra hermana Carmen de Cristo, ella desde el cielo seguro que también os da las gracias.

Carmen era la menor de los hijos de D. Manuel  y Dña. Isabel, desde pequeña (contaba ella misma) era la alegría de la familia, le gustaba cantar sobre todo el cante «hondo» y lo hacía muy bien. Cuando entró en el Carmelo lo siguió haciendo con letras dedicadas a alabar al Señor. Toda su vida de carmelita fue muy entregada a la oración por su familia, comunidad, la Iglesia y especialmente por los sacerdotes, se interesaba por los demás brindando una escucha atenta y una palabra de ánimo a quien lo necesitaba; muy fraterna, trabajadora, responsable y pulcra en todos los oficios que le encomendaban, tenía un corazón grande (literalmente) y enfermar del corazón fue el comienzo de su declive. Hasta el final no faltó una sonrisa y un «gracias» para quien le prestara un servicio, por pequeño que fuera.

El Señor nos regaló un toque de cielo al poder acompañarla en sus últimos momentos. Coincidió con la hora de recreación después de cenar estuvimos junto a ella rezando y cantando a la Virgen hasta que el Señor la llamó a su lado.

En su funeral se hicieron presentes nuestros hermanos carmelitas PP. Amando y Jorge Humberto, nuestro capellán P. Agripino, el párroco de Serra D. José Luis, el antiguo párroco de Masarrochos D. Miguel y el actual D. Ramón, así como D. José Vidal. También asistieron familiares y amistades de su querido pueblo Masarrochos.

Nuestros hermanos carmelitas, PP. Sebas y Xano, no pudieron llegar a tiempo para celebrar la Misa debido a retenciones en la autovía, pero sí nos acompañaron en el entierro con un solemne responso y bendición.

Damos gracias a Dios por lo compartido con nuestra hermana Carmen.

23 07 28 ALQUERÍAS, Hna Mª Rosa, Crónica de las Bodas de Oro

Este año, la solemnidad de nuestra Madre, la Virgen del Carmen, ha sido especial para mí. Todo el Carmelo hemos celebrado su fiesta en comunión y con gozosa alegría; pero nuestra comunidad además, el 50 Aniversario de mi Profesión.

El día lo comenzamos cantando a la Virgen procesionalmente y haciendo tres paradas en distintos lugares del convento. Después tuvimos Laudes cantados y la oración.

La eucaristía, a las 12,00 h, la presidió nuestro Sr. Obispo, D. Casimiro, y concelebraron otro Obispo Operario jubilado con los sacerdotes de la Residencia Mosén Sol, el párroco de Alquerías, nuestro capellán y un padre carmelita (P. Vicente Martínez Blat), que representó para mí a todo el Carmelo.

La iglesia, llena de fieles y el coro de Alquerías que lo cantó todo. Yo renové mi Profesión junto al altar y de corazón y más consciente que el primer 16 de julio de 1973. Coincide que fue también el Centenario de Sta. Teresita del Niño Jesús, y ahora conmemoramos los 150 años de su nacimiento, que está siendo para mí una experiencia muy emotiva. Con ella hice un día de retiro antes de la celebración.

En la eucaristía hubo ofrendas, las llevé junto a mis dos sobrinos nietos, Daniela y Mario. Al final de la misa di las gracias a todos brevemente, pero no me esperaba que se acercara al presbiterio el Alcalde de Alquerías, recién elegido, muy joven, para entregarme un obsequio de cerámica y dedicarme unas palabras que impactaron a los asistentes por su contenido cristiano. Él se invitó a la fiesta y también se quedó a comer.

Comieron dentro, en el claustro: a un lado los obispos, el clero y las monjas, y en el otro lado, la familia y amigos de la comunidad. Curiosamente, el alcalde nos cantó una jota, y un joven de Alquerías, que es tenor profesional, también cantó una canción: “La roca fría del Calvario” de La Dolorosa, muy sentida.

Todos lo pasamos bien. Mi familia con el paso del tiempo se ha hecho más corta pero aún tengo en el pueblo un tío con 91 años que quiso venir y después de muchos años sin vernos, ha sido una gran alegría volvernos a encontrar.

Termino ya dando gracias a mis hermanas de comunidad y sobre todo a Dios que tanto me ha regalado en la vida y me sigue dando, antes y después de mi consagración. “SU MISERICORDIA ES ETERNA”

Rezad por mí, para que con su ayuda, yo sea igual de generosa con EL

Os agradezco a todas las Comunidades vuestros regalos, todos fabulosos.

En la foto “exposición”, os tengo muy presentes. ¡GRACIAS!

23 07 10 GODELLETA, Visita Virgen de los Desamparados

Queridas Hermanas, hoy queremos compartir con vosotras algo que para nosotras ha sido un regalo del Señor. 

Con motivo de las fiestas del pueblo de Alborache, cercano a Godelleta, nos ofrecieron la posibilidad de que a su paso cerca del Monasterio subiera a visitarnos la Virgen peregrina de los Desamparados. 

La hora no era muy fresca que digamos de 3,15 a 3,30 de la tarde; pero el sol no nos iba a impedir recibir a Nuestra Madre y Patrona. Por suerte amaneció el día medio nublado y los que la traían también se demoraron mas de lo previsto. 

El día 6 de este mes de Julio de buena mañana comenzamos los preparativos para recibirla como Ella se merece. Invitamos a nuestros feligreses y amigos. Después de esperar bastante, por fin llego Nuestra Madre con el maremóvil. Allí le estábamos esperando. 

Siempre vamos a ver a la Virgen, en esta ocasión era distinto era Ella quien quería venir a visitarnos. Fue emocionante tenerla delante de nosotras y de quienes nos acompañaban. La recibimos con un canto mariano, le ofrecimos un ramo de flores de nuestra huerta, poesía, oración y como despedida el Himno a la Virgen de los Desamparados. Nos hubiera gustado estar más tiempo ante Ella orando pero no pudo ser por el retraso, ya que en otros pueblos por donde iba a pasar la estaban esperando. Después de unos cuantos ¡¡¡Vivas!!! la despedimos. Algunos de los presentes nos decían que habían quedado impactados con la visita de la Virgen. Como no éramos muchos fue todo muy familiar y también muy entrañable.

GRACIAS MADRE POR HABER VISITADO NUESTRA COMUNIDAD. BENDÍCENOS Y AMPÁRANOS CON TU AMOR DE MADRE!!! Bajo tu protección nos ponemos.

Un abrazo para todas y feliz Novena de la Virgen del Carmen. 

                                                                   Vuestras Hermanas de Godelleta

23 06 15 ALBACETE, Hnas Yuly y Ana, Curso Ruaj

Queridas hermanas de la Federación:

Somos María Yuly y Ana Belén de la comunidad de Albacete. Hace un par de semanas concluimos la primera parte del curso sobre “integración afectivo sexual”, impartido por una carmelita Vedruna del equipo Ruaj. A sugerencia de la hermana Salud, nos animamos a compartir un poco de lo aprendido.

Este primer año se desarrolló en tres sesiones, cada una de ellas de dos días. Las dos primeras fueron on-line y la última en forma presencial. A ellas asistieron algunas hermanas en formación inicial, a quienes estaba específicamente dirigido, y algunas formadoras de distintas federaciones.

Este curso busca aportarnos algunas herramientas que nos ayuden y faciliten la vivencia sana y cristiana del amor célibe, al que hemos optado como religiosas. El punto de partida es la conciencia que tenemos de emplear los medios a nuestra disposición, y así favorecer que toda nuestra vida se oriente, de la manera más armoniosa posible, hacia esa “perla preciosa” que es nuestra vocación. Entre esos medios, se encuentra nuestro mundo afectivo, que juega un papel muy importante en el seguimiento de Jesús. Conocer los límites, las dificultades y las posibilidades de nuestra afectividad nos puede ayudar a integrar mejor lo que experimenta mi cuerpo, lo que pasa por mi mente y lo que siente mi corazón, y hacer fluir toda esa energía en lo que necesito para cuidar de esa “perla” en la que se invierte todo el capital. Es ir dando pequeños pasos en el conocimiento propio y ganando en libertad para tener un corazón unificado que nos permita atenuar en nosotras el grito del apóstol: “hago lo que no quiero”.

En el primer encuentro, en noviembre del 2022, se nos ofreció un marco teórico para facilitar la comprensión de la sexualidad desde un enfoque integral. Se partió de los conceptos que tenemos sobre ella. Puesto que la sexualidad incluye nuestra manera de ser, estar y de relacionarme con el mundo y, por tanto, abarca toda nuestra vida, la forma que tenemos de concebirla condiciona nuestra manera de amar y puede llegar incluso a distorsionar negativamente nuestra imagen de Dios. Despejar esas ideas y comprender la sexualidad en su globalidad nos ayuda en la opción que hemos hecho por el amor célibe. Nos permite reconocer nuestros deseos, necesidades y límites para poder cuidar de nosotras mismas y proteger a los demás.

Se hizo hincapié en reconectar con el cuerpo, en mejorar nuestra relación con él. En esta gran aventura de vivir la vocación, el cuerpo es compañero indispensable. Es medio para estar en contacto con la realidad, con los demás. Es también fuente de revelación. Debemos convertirlo en nuestro aliado, aprender a escucharlo, porque sufre y expresa, queramos o no, todo lo que vivimos. También al cuerpo debemos integrarlo consciente y plenamente, y conducirlo “con alegría y libertad” bien entendidas.

En la segunda sesión, tratamos sobre las emociones y su gestión. Además del cuerpo, las emociones son otra fuente importante de información y de energía que hay que reorganizar para ir en pos de la perla. De nuevo comenzamos desmitificando las ideas que se puedan tener sobre las emociones. Tratamos de verlas en su complejidad, de apartar juicios, y de ver sus funciones: informar, proteger, motivar. Analizamos brevemente las cuatro principales, el miedo, la ira, la tristeza y la alegría. Lo importante era comprender cómo funcionan: lo que sucede desde que se vive una situación, el sentimiento que nos provoca, los pensamientos que surgen y nuestra actuación. Empezando con el miedo, al final de una exposición más teórica, se nos proporcionó un espacio de tiempo para rebuscar en la memoria momentos donde experimentamos miedo y ver cada una de esas cuatro partes: situación, sentimiento, pensamiento y actuación.

Es un método para revisar de manera consciente nuestros sentimientos y comprender lo que impulsa nuestras acciones. Lo que buscamos es tener conocimiento de cómo las experimentamos y vivimos para poder ser libres de optar y que no vayamos sin control. Y en ello median necesariamente tanto el pensamiento como el sentimiento. La falta de discernimiento sobre como dirigirnos en muchas de nuestras acciones proviene de esa separación, de no razonar lo que siento o de razonarlo excesivamente. Se trata de aprender a escuchar nuestras emociones, el mensaje que nos traen, porque son como llamadas de atención sobre algo que nos sucede, y hallar respuestas adecuadas. Es, en definitiva, encauzar y aprovechar toda esa energía en el proyecto que deseamos vivir. Esta metodología se repitió con las restantes emociones en la última sesión. Fue lo que más nos ayudó, ese vernos desde situaciones reales que hemos pasado y analizar un poco como las actuamos.

Esperamos que esta síntesis del curso sea para vuestro provecho también. Hasta la próxima. Un fuerte abrazo a todas.